Plague: el zen de la viralidad pura


Imagina una red social en la que todos los usuarios (todos) estén conectados entre sí.

Una red social sin seguidores ni seguidos en la que puedas compartir ideas (en 139 caracteres), fotos, videos o enlaces. Y dónde cualquier cosa que compartas pueda llegar a cualquier parte del mundo. Una red social altamente "infecciosa". Eso es, a grandes rasgos, PLAGUE.


Todo comienza aquí y ahora

Desde ahí, donde tú estás, comparte lo que quieras. Esto, obviamente, requiere que Plague conozca tu ubicación aproximada. Desde ahí, llegará a todos los usuarios que se encuentren cerca. En principio, el radio de acción es amplio, como ya comprobarás. Y
cada usuario que vea tu publicación puede decidir saltar a otra o compartirla y saltar a otra.

Como observarás, la pantalla para compartir es espartana: un area para escribir tus pensamientos (Your thoughts) y la posibilidad de publicar una foto o video. También puedes escribir o pegar un enlace a un sitio y automáticamente tomará el título o algo de texto y, si es posible, una imagen.

Extremadamente sencillo

Basta el dedo gordo de una mano. Al abrir la aplicación comienzas a ver, una por una, las publicaciones que comparten personas cercanas a ti. El origen de esas publicaciones puede ser, eso sí, cercano o lejano... recuerda que puedes compartir lo que te llega de otros. Ese es el mecanismo de la infección.

Si arrastras la publicación hacia arriba la compartes con gente (más o menos) cercana y verás otra nueva.

Si arrastras la publicación hacia abajo, pasas a otra sin compartirla.

Así de simple.


¿Cómo se propaga la "infección"?

Muy fácil: gente próxima la ve y si quiere, la comparte. Así va avanzando geográficamente hasta, si es posible, llegar a todo el mundo, literalmente. Esto, en teoría es así, luego en la práctica ya verás que hay detalles.

Por ejemplo, según dónde estés ubicado habrá más o menos gente cercana. En principio parece que la aplicación se ha configurado para que el radio al que puedes llegar inicialmente sea generosamente amplio, del orden de 500 o 1000 kilómetros aparentemente. Cabe suponer que cuando haya muchos más usuarios utilizando Plague (y esto probablemente no tarde mucho) ese radio se vaya haciendo algo más pequeño.

Aún así, es fácil ver que una publicación puede llegar a usuarios de muchos países distintos. Y es bonito verlo en un elegante mapa de la infección.


Zen, zen, zen

Esta aplicación tiene el mérito de haberse despojado de casi toda la ansiedad de conseguir seguidores, amigos, megusta y tonterías semejantes. Compartes (más bien esparces) en plan silvestre. Lo que no quita, eso sí, que puedas acabar consultando las estadísticas convulsivamente a ver hasta dónde ha llegado lo que publicaste. Que no todo es relajación perfecta.

Luego, también, estamos los que nos gusta desarmar todo para ver cómo funciona. La gran pregunta es ¿qué criterio o qué algoritmo se utiliza para determinar cómo se propaga la infección?. Aún no está muy claro. De hecho, cabe preguntarse cómo cruzará el gran charco un mensaje cualquiera. Si publicas desde Europa ¿llegará a América?. Puede. Pero es más fácil si estás más cerca.

Experimentando con ubicaciones falsas en Android, cuando me he situado en medio del Atlántico el mensaje ha llegado muy fácilmente a América. Desde Europa no es tan fácil. Así que, al final, auguro que saldrán auténticos especialistas en ubicarse en puntos concretos equidistantes de Europa y América, por ejemplo. Pero todo esto ya se aleja demasiado del zen inicial, de la simplicidad y despreocupación absoluta que es uno de los grandes puntos fascinantes de Plague.


Comentarios sí que hay

O sea, es posible comentar cualquier publicación. Y también suscribirse a esa publicación para seguir y estar al tanto de los comentarios nuevos que vayan apareciendo en ella. Eso es lo máximo que puedes seguir. Recuerda que no es posible seguir usuarios (ya los sigues a todos, potencialmente hablando).

Una publicación (en este caso con foto) es así:



Y si pulsas en el icono de los comentarios, puedes leerlos o escribir el tuyo.


Y en ese botón con tres puntos que aparece en la esquina superior izquierda puedes pulsar "subscribe". El término, algo confuso, significa en realidad que esa publicación la guardas para seguir los nuevos comentarios que se vayan produciendo.


¿Cuánto duran las publicaciones?

Durante unos 7 días tienen la posibilidad de esparcirse por el mundo. Tras ese tiempo, ya no aparecerán más excepto para aquellos que hayan decidido seguir los comentarios que se vayan produciendo en ella.


¿Es posible complicar la aplicación?

Claro, y hasta es posible que lo haga (o no).  Los gustos y preferencias de la gente son muy diversos. ¿Demasiado Zen todo? A mi, personalmente, me ha gustado el concepto. Luego la gente pedirá cosas como que se puedan descargar las imágenes, que se puedan compartir con otras redes sociales, que se puedan seguir usuarios concretos... todo será ir enredando el asunto.

De cualquier forma, es una aplicación que merece la pena probarse. Pero, ojo... posiblemente te enganche sin remedio.

Plague, web oficial (aplicación para iOS y Android)

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